Sobre mí

Soy Laura Regàs y estoy formada en dietética integrativa, health coaching, neuropsicología y psiconeuroinmunología, y estoy especializada en trastornos de la alimentación. Pero no siempre ha sido así. De hecho, inicié mi vida laboral en un sector bien distinto, el de la publicidad, al que aterricé un poco por casualidad, más empujada por voluntades ajenas que por un interés propio y real. Algo completamente comprensible si tenemos en cuenta que a los 17 años mi vida giraba única y exclusivamente en torno a lo que comía, a las calorías que ingería y al peso que marcaba la báscula; poco más importaba.

Los problemas con mi cuerpo y la comida no empezaron justo en ese punto (lo hicieron, en realidad, unos cuantos años antes), pero fue en 1998 cuando todo se torció definitivamente, iniciándose una debacle emocional y mental que arrasó los siguientes 15 años de mi vida. Durante todos esos años fui malviviendo, intercalando etapas en las que buscaba ayuda con etapas de absoluta desidia, en las que me convencía que nada ni nadie podría ayudarme. 

No fue hasta los 30 años, y después de una dura recaída, en que empecé a ver la luz. Esta vez, a diferencia de las anteriores, sentía una auténtica necesidad de salir del túnel porque por primera vez sentía que había cosas por las que valía la pena seguir adelante. Así que decidí poner mi vida en pausa y volcarme en la recuperación. Lo dejé todo aparcado y me centré en mí. Y tras dos años de trabajo duro conseguí el alta definitiva. Estaba, por fin, curada.

Sin embargo, algo en mí seguía roto. Cierto era que ya no vivía tan obsesionada con la comida, y que había conseguido que la báscula y el peso ya no fueran el centro de mi vida… Pero algo seguía fallando. Me sentía incapaz de soltar el control. Me sentía incapaz de confiar en mi cuerpo y atender las señales que me mandaba. No me habían enseñado cómo hacerlo.

Empecé a investigar por mi cuenta, a leer libros, a seguir a mujeres que habían conseguido salir de esta misma situación buscando respuestas, y me dejé empapar por todos los nuevos conocimientos que iba adquiriendo: alimentación consciente, cultura de dieta, aceptación y liberación corporal, trauma complejo… Y ahí, al fin, ví la luz. Fue un punto de no retorno de tal magnitud que decidí abandonar el mundo de la publicidad y empezar de 0. 

Empecé a formarme en diferentes campos de la salud y la nutrición, poniendo especial énfasis en mindful eating y trastornos alimentarios, con la firme decisión de obtener herramientas para poder acompañar a otras personas a sanar su relación con la comida y con sus cuerpos, tal y como yo había conseguido hacer.